El proyecto se encuentra en un tranquilo pueblo de Guatemala, rodeada de exuberante vegetación y vistas panorámicas impresionantes. Su exterior es de un blanco puro y luminoso, que contrasta elegantemente con detalles en madera que le dan calidez y armonía al acceso.
La casa ha sido diseñada cuidadosamente para maximizar las vistas al paisaje espectacular que la rodea. Amplios ventanales de piso a techo permiten que la luz natural inunde los espacios interiores y ofrecen vistas ininterrumpidas de las montañas y el valle que se extiende ante ella.